Reina Valera Gómez 1Asimismo, hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios que ha sido dada a las iglesias de Macedonia;
2que en grande prueba de tribulación, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad.
3Porque de su voluntad han dado conforme a sus fuerzas, yo testifico, y aun más allá de sus fuerzas;
4pidiéndonos con muchos ruegos que aceptásemos la ofrenda y la comunicación del servicio para los santos.
5Y esto hicieron, no como lo esperábamos, sino que primero se dieron a sí mismos al Señor, y a nosotros por la voluntad de Dios.
6De manera que exhortamos a Tito, que como comenzó, así también acabe esta gracia entre vosotros también. 7Por tanto, como en todo abundáis, en fe, y en palabra, y en ciencia, y en toda solicitud, y en vuestro amor para con nosotros, mirad que también abundéis en esta gracia. 8No hablo como quien manda, sino por causa de la diligencia de otros, y para probar la sinceridad de vuestro amor. 9Porque ya sabéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor de vosotros, siendo rico se hizo pobre; para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos. 10Y en esto doy mi consejo; porque esto os conviene a vosotros, que comenzasteis antes, no sólo a hacerlo, sino también a quererlo, desde el año pasado. 11Ahora, pues, llevad también a cabo el hecho, para que como estuvisteis prestos a querer, así también lo estéis en cumplir conforme a lo que tenéis. 12Porque si primero hay la disposición, será acepta según lo que uno tiene, no según lo que no tiene. 13Pero no digo esto para que haya abundancia para otros, y para vosotros escasez; 14sino para que con igualdad, ahora en este tiempo, vuestra abundancia supla lo que a ellos falta, para que también la abundancia de ellos supla lo que a vosotros falta, de modo que haya igualdad; 15como está escrito: El que recogió mucho, no tuvo más; y el que poco, no tuvo menos. 16Mas gracias sean dadas a Dios, que puso en el corazón de Tito la misma solicitud por vosotros. 17Pues a la verdad aceptó la exhortación; y estando también muy solícito, de su voluntad partió para ir a vosotros. 18Y enviamos juntamente con él al hermano cuya alabanza en el evangelio es por todas las iglesias; 19y no sólo esto, sino también fue escogido por las iglesias para viajar con nosotros con esta gracia, que es administrada por nosotros para gloria del Señor mismo, y para demostrar vuestra buena disposición; 20evitando que nadie nos difame en esta abundancia que administramos; 21procurando hacer lo honesto, no sólo delante del Señor, sino también delante de los hombres. 22Y enviamos con ellos a nuestro hermano, la diligencia del cual hemos comprobado muchas veces en muchas cosas, y ahora mucho más diligente por la mucha confianza que tengo en vosotros. 23Si alguno preguntare acerca de Tito, él es mi compañero y colaborador para con vosotros; o acerca de nuestros hermanos; ellos son mensajeros de las iglesias, y la gloria de Cristo. 24Mostrad, pues, para con ellos y ante las iglesias la prueba de vuestro amor, y de nuestro gloriarnos acerca de vosotros. |