Reina Valera Gómez 1Oíd la palabra de Jehová, hijos de Israel, porque Jehová contiende con los moradores de la tierra; porque no hay verdad, ni misericordia, ni conocimiento de Dios en la tierra. 2Perjurar, mentir, matar, hurtar y adulterar prevalecen, y derramamiento de sangre tras derramamiento de sangre. 3Por lo cual, se enlutará la tierra, y se extenuará todo morador de ella, con las bestias del campo, y las aves del cielo: y aun los peces del mar fallecerán. 4Ciertamente hombre no contienda ni reprenda a hombre, porque tu pueblo es como los que resisten al sacerdote. 5Caerás por tanto en el día, y caerá también contigo el profeta de noche; y a tu madre talaré. 6Mi pueblo fue destruido porque le faltó conocimiento. Porque tú desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos. 7Conforme a su grandeza así pecaron contra mí; por tanto, cambiaré su honra en afrenta. 8Comen del pecado de mi pueblo, y en su maldad levantan su alma. 9Tal será el pueblo como el sacerdote: y visitaré sobre él sus caminos, y le pagaré conforme a sus obras. 10Y comerán, mas no se saciarán; fornicarán, mas no se aumentarán; porque dejaron de escuchar a Jehová. 11Fornicación, vino, y mosto quitan el corazón. 12Mi pueblo a su ídolo de madera consulta, y su vara le responde; porque el espíritu de fornicaciones los ha engañado, y se han dado a la fornicación dejando a su Dios. 13Sobre las cabezas de los montes sacrificaron, e incensaron sobre los collados, debajo de encinas, y álamos, y olmos que tuviesen buena sombra; por tanto, vuestras hijas fornicarán, y adulterarán vuestras nueras. 14No visitaré sobre vuestras hijas cuando fornicaren, y sobre vuestras nueras cuando adulteraren: porque ellos ofrecen sacrificios con las rameras, y con las malas mujeres sacrifican; por tanto, el pueblo sin entendimiento caerá. 15Si fornicares tú, Israel, a lo menos no peque Judá; y no entréis en Gilgal, ni subáis a Betaven; ni juréis: Vive Jehová. 16Porque como becerra rebelde se apartó Israel: ¿los apacentará ahora Jehová como a carneros en lugar espacioso? 17Efraín es dado a ídolos; déjalo. 18Su bebida se corrompió; fornicaron pertinazmente; sus príncipes amaron lo que avergüenza. 19La ató el viento en sus alas, y se avergonzarán de sus sacrificios. |