Versos Paralelos La Biblia de las Américas y al tercer día, con sus propias manos arrojaron al mar los aparejos de la nave. Nueva Biblia Latinoamericana Al tercer día, con sus propias manos arrojaron al mar los aparejos de la nave. Reina Valera Gómez y al tercer día nosotros con nuestras manos arrojamos los aparejos de la nave. Reina Valera 1909 Y al tercer día nosotros con nuestras manos arrojamos los aparejos de la nave. Biblia Jubileo 2000 y al tercer día nosotros, con nuestras manos, arrojamos las obras muertas de la nave. Sagradas Escrituras 1569 y al tercer día nosotros, con nuestras manos, arrojamos las obras muertas de la nave. King James Bible And the third day we cast out with our own hands the tackling of the ship. English Revised Version and the third day they cast out with their own hands the tackling of the ship. Tesoro de la Escritura we. Job 2:4 Jonás 1:5 Marcos 8:35-37 Lucas 9:24,25 Enlaces Hechos 27:19 Interlineal • Hechos 27:19 Plurilingüe • Hechos 27:19 Español • Actes 27:19 Francés • Apostelgeschichte 27:19 Alemán • Hechos 27:19 Chino • Acts 27:19 Inglés • Bible Apps • Bible HubLas citas Bíblicas son tomadas de La Biblia de las Américas © 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, //www.lockman.org. Usadas con permiso. Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia de los Hispanos © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, //www.lockman.org. Usadas con permiso. Reina Valera Gómez (© 2010) Contexto La tempestad en el mar …18Al día siguiente, mientras éramos sacudidos furiosamente por la tormenta, comenzaron a arrojar la carga; 19y al tercer día, con sus propias manos arrojaron al mar los aparejos de la nave. 20Como ni el sol ni las estrellas aparecieron por muchos días, y una tempestad no pequeña se abatía sobre nosotros, desde entonces fuimos abandonando toda esperanza de salvarnos.… Referencia Cruzada Jonás 1:5 Los marineros tuvieron miedo y cada uno clamaba a su dios; y arrojaron al mar la carga que estaba en el barco para aligerarlo. Pero Jonás había bajado a la bodega del barco, se había acostado y dormía profundamente. Hechos 27:18 Al día siguiente, mientras éramos sacudidos furiosamente por la tormenta, comenzaron a arrojar la carga; Hechos 27:20 Como ni el sol ni las estrellas aparecieron por muchos días, y una tempestad no pequeña se abatía sobre nosotros, desde entonces fuimos abandonando toda esperanza de salvarnos. |