Reina Valera Gómez 1«Canción: Salmo de los hijos de Coré» Grande es Jehová y digno de ser en gran manera alabado, en la ciudad de nuestro Dios, en su monte santo. 2Hermosa provincia, el gozo de toda la tierra es el monte de Sión, a los lados del norte, la ciudad del gran Rey. 3Dios en sus palacios es conocido por refugio. 4Porque he aquí los reyes de la tierra se reunieron; pasaron todos. 5Y viéndola ellos así, se maravillaron, se turbaron, se dieron prisa a huir. 6Les tomó allí temblor; dolor, como a mujer que da a luz. 7Con viento solano quiebras tú las naves de Tarsis. 8Como lo oímos, así hemos visto en la ciudad de Jehová de los ejércitos, en la ciudad de nuestro Dios: Dios la afirmará para siempre. (Selah) 9Nos acordamos de tu misericordia, oh Dios, en medio de tu templo. 10Conforme a tu nombre, oh Dios, así es tu loor hasta los fines de la tierra; de justicia está llena tu diestra. 11Se alegrará el monte de Sión; se gozarán las hijas de Judá por tus juicios. 12Andad alrededor de Sión, y rodeadla; contad sus torres. 13Observad atentamente su antemuro; mirad sus palacios; para que lo contéis a la generación venidera. 14Porque este Dios es Dios nuestro eternamente y para siempre: Él nos guiará, aun hasta la muerte. |