Reina Valera Gómez 1Así me ha mostrado el Señor Jehová; y he aquí, Él criaba langostas al principio que comenzaba a crecer el heno tardío; y he aquí, era el heno tardío después de las siegas del rey. 2Y aconteció que cuando acabó de comer la hierba de la tierra, yo dije: Oh Señor DIOS, perdona, te ruego; ¿quién levantará a Jacob? Porque es pequeño. 3Se arrepintió Jehová de esto: No será así, dice Jehová. 4El Señor Jehová me mostró así; y he aquí, llamaba para juzgar por fuego el Señor Jehová; y consumió un gran abismo, y consumió una parte de la tierra. 5Y dije: Señor Jehová, cesa ahora; ¿quién levantará a Jacob? Porque es pequeño. 6Se arrepintió Jehová de esto: No será esto tampoco, dijo el Señor Jehová. 7Me enseñó así: He aquí, el Señor estaba sobre un muro hecho a plomo, y en su mano una plomada de albañil. 8Jehová entonces me dijo: ¿Qué ves, Amós? Y dije: Una plomada de albañil. Y el Señor dijo: He aquí, yo pongo plomada de albañil en medio de mi pueblo Israel: No le pasaré más: 9Y los altares de Isaac serán destruidos, y los santuarios de Israel serán asolados; y me levantaré con espada sobre la casa de Jeroboam. 10Entonces Amasías sacerdote de Betel envió a decir a Jeroboam, rey de Israel: Amós ha conspirado contra ti en medio de la casa de Israel; la tierra no puede soportar todas sus palabras. 11Porque así ha dicho Amós: Jeroboam morirá a espada, e Israel pasará de su tierra en cautiverio. 12Y Amasías dijo a Amós: Vidente, vete, y huye a tierra de Judá, y come allá tu pan, y profetiza allí: 13Y no profetices más en Betel, porque es santuario del rey, y cabecera del reino. 14Entonces respondió Amós, y dijo a Amasías: Yo no era profeta, ni hijo de profeta, sino que era boyero, y recogía higos silvestres. 15Y Jehová me tomó de detrás del ganado, y me dijo Jehová: Ve, y profetiza a mi pueblo Israel. 16Ahora, pues, oye palabra de Jehová. Tú dices: No profetices contra Israel, ni hables contra la casa de Isaac. 17Por tanto, así dice Jehová: Tu esposa será ramera en la ciudad, y tus hijos y tus hijas caerán a espada, y tu tierra será repartida a cordel; y tú morirás en tierra inmunda, e Israel será llevado cautivo lejos de su tierra. |