Biblia Jubileo 2000 1Pero el Espíritu dice manifiestamente, que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus de error y a doctrinas de demonios;
2que con hipocresía hablarán mentira, teniendo cauterizada la conciencia,
3prohibirán casarse y mandarán apartarse los hombres de las viandas que Dios creó para que, con acción de gracias, participaran de ellas los fieles que han conocido la verdad.
4Porque todo lo que Dios creó es bueno, y nada hay que desechar, tomándose con acción de gracias;
5porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado. 6Si esto propusieres a los hermanos, serás buen ministro de Jesús el Cristo, criado en las palabras de la fe y de la buena doctrina, la cual has alcanzado. 7Mas las fábulas profanas y de viejas, desecha, y ejercítate para la piedad. 8Porque el ejercicio corporal es provechoso para un poco; mas la piedad para todo aprovecha, porque tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera. 9La palabra es fiel, y digna de ser recibida de todos. 10Que por esto aún trabajamos y sufrimos oprobios, porque esperamos en el Dios viviente, el cual es Salvador de todos los hombres, y mayormente de los fieles. 11Esto manda y enseña. 12Ninguno tenga en poco tu juventud; mas sé ejemplo de los fieles en palabra, en conversación, en caridad, en espíritu, en fe, en limpieza. 13Entre tanto que voy, ocúpate en leer, en exhortar, en enseñar. 14No menosprecies el don que está en ti, que te es dado para profetizar mediante la imposición de las manos de los ancianos. 15En estas cosas ocúpate con cuidado, en éstas está todo; de manera que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos. 16Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; sé diligente en esto, porque si así lo hicieres, a ti mismo te salvarás y a los que te oyen. |