Cuando el ángel extendió su mano hacia Jerusalén para destruirla, el SEÑOR se arrepintió del mal, y dijo al ángel que destruía al pueblo: ¡Basta! ¡Detén ahora tu mano! Y el ángel del SEÑOR estaba junto a la era de Arauna jebuseo. 24:16,17 Tal vez había más maldad, especialmente más orgullo, y ese fue el pecado ahora castigado en Jerusalén que en otros lugares, por lo que la mano del destructor está extendida sobre esa ciudad; pero el Señor se arrepintió de aquel mal, no cambió de opinión, pero a su manera. En el mismo lugar donde Abraham se detuvo de matar a su hijo, este ángel, por una contraorden similar, se quedó de la destrucción de Jerusalén. Es por el bien de la gran Sacrificio, que nuestras vidas decomisados se conservan del ángel destructor. Y en David es el espíritu de un verdadero pastor del pueblo, ofreciéndose a sí mismo como sacrificio a Dios, por la salvación de sus súbditos.2 Samuel 24 Comentario de Matthew Henry, traducido del Inglés Enlaces 2 Samuel 24:16 Interlineal • 2 Samuel 24:16 Plurilingüe • 2 Samuel 24:16 Español • 2 Samuel 24:16 Francés • 2 Samuel 24:16 Alemán • 2 Samuel 24:16 Chino • 2 Samuel 24:16 Inglés • Bible Apps • Bible HubLas citas Bíblicas son tomadas de La Biblia de las Américas © 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, //www.lockman.org. Usadas con permiso. |